¿Duele mucho tatuarse?

Esta es una pregunta que me hacen a menudo. Para responderla, vamos a tener que hablar sobre los receptores de dolor, el pigmento, y el proceso del tatuaje en general.

La piel tiene una cantidad específica de receptores nerviosos por cada centímetro cuadrado. Supongo que si en una zona hay más receptores, la sensibilidad será mayor. Esto significa que en ciertos lugares del cuerpo la experiencia del dolor va a ser más intensa que en otras áreas con menos concentración de receptores.

Existen dos tipos principales de receptores: unos perciben el dolor, y otros la presión. Los receptores de presión, cuando se estimulan levemente, producen cosquillas; mientras que los receptores de dolor, cuando se estimulan ligeramente, generan picor.

Las agujas de tatuaje rara vez son individuales. A pesar de que a simple vista puedan parecer finas, en realidad están agrupadas en números como tres, cinco, siete o incluso más. Estas agujas pueden estar juntas en un punto o dispersas, como si fueran los dientes de un peine. Lo que hacen es penetrar la piel y estimular al máximo los receptores de dolor, enviando una señal al cerebro que indica que está siendo "agredido". Esta es la razón por la cual, de manera instintiva, el cuerpo quiere moverse o escapar del dolor. Cuando el dolor aumenta, la tendencia a sacar la parte del cuerpo que está siendo tatuada también aumenta, como en el caso de un tatuaje en el brazo, donde querrás retirarlo.

Las etapas del dolor durante un tatuaje

El tiempo es un factor importante. El dolor no es constante, sino que pasa por varias etapas. La primera fase es de tolerancia. Al principio, cuando el cuerpo siente la agresión, el sistema de respuesta libera sustancias químicas como endorfinas y dopamina, que nos ayudan a lidiar con el dolor. Esta etapa puede durar entre 30 minutos y dos horas. En esta fase, algunos sienten sueño o una relajación ligera.

Sin embargo, cuando estas sustancias empiezan a disminuir, el dolor se vuelve más molesto e incómodo. Esto suele ocurrir después de dos horas y media o tres horas de estar tatuando. A partir de ahí, el dolor se percibe de manera más intensa porque la piel ya está inflamada y más sensible. Es importante tener en cuenta que esta inflamación no solo aumenta la sensibilidad, sino que también puede hacer que la piel se rompa más fácilmente si se sigue tatuando por un periodo prolongado.

El umbral del dolor varía

El dolor es una experiencia individual, y cada persona tiene su propio umbral de tolerancia. En mi experiencia como tatuador, he notado que los adultos mayores suelen tolerar el dolor mucho mejor que los jóvenes de 16 o 17 años. Esto se debe a que los jóvenes, en general, no han pasado por experiencias de dolor intenso como fracturas o cirugías, mientras que las personas mayores ya han vivido esas experiencias y desarrollan una mayor tolerancia. Esto no quiere decir que no haya jóvenes que toleren bien el dolor o adultos mayores que no lo soporten, pero en general, esta ha sido mi observación.

¿El blanco duele más al tatuar?

Esta es otra creencia popular. La realidad es que todos los pigmentos tienen una densidad similar, por lo que no hay manera de que los receptores de dolor puedan detectar si un color duele más que otro. Una vez que la aguja entra en la piel, el dolor que genera no depende del color del pigmento. No obstante, el blanco se aplica al final, porque es el tono más claro y el orden en un tatuaje suele ir de los colores más oscuros a los más claros.

Para cuando llegamos al blanco, la piel ya ha pasado por muchas horas de trabajo, está inflamada y extremadamente sensible. Además, al no haberse tocado esa área por un rato, cuando se vuelve a trabajar sobre ella, no importa si es con blanco, verde, negro o rosado, el dolor será mayor debido a la sensibilidad acumulada. Por eso muchas personas creen que el blanco duele más, pero en realidad es el tiempo de trabajo lo que causa esa sensación.

Si conoces a alguien que le tiene miedo al dolor del tatuaje o que está por hacerse uno y no se anima, envíale esta información para que tenga un poco más de claridad sobre el proceso.